
Por Beatriz Diuk.
“La conciencia fonológica es antigua. Los maestros siempre enseñaron los sonidos de las letras”.
Hemos leído estas afirmaciones con preocupación, porque ponen en evidencia que no se ha comprendido qué es la conciencia fonológica.
La conciencia fonológica no es conocer los sonidos de las letras. De hecho, la conciencia fonológica no involucra a las letras, es una habilidad relacionada con la oralidad. Se denomina conciencia fonológica a la habilidad para reconocer y manipular los sonidos que forman las palabras orales, las palabras de nuestra lengua, las palabras que sabemos, que decimos.
El nivel de desarrollo de la conciencia fonológica se pone de manifiesto cuando podemos, por ejemplo:
Tal vez el siguiente ejemplo ayude a comprender que la conciencia fonológica es distinta del conocimiento de las letras. Pensemos: los nombres de los objetos aquí dibujados, ¿empiezan con el mismo sonido?
En la Argentina, sí. En España, no. En ambos países se escriben igual. Pero la conciencia fonológica es la habilidad de atender a los sonidos, no a las letras. Y, en Argentina, el primer sonido de zapato se pronuncia igual que el primer sonido de silla.
Para el aprendiz principiante, escribir palabras involucra dos momentos:
1. Analizar la palabra oral para reconocer el sonido..
Que un niño o una niña están analizando la palabra oral es evidente cuando los vemos repetir una sílaba tratando de deslindar los sonidos: “sa, sa, sa, ¡Ah! La ssss”. La capacidad de reconocer los sonidos que forman las palabras requiere del desarrollo de una compleja habilidad metalingüística, la conciencia fonémica, que es parte de las habilidades de conciencia fonológica. No tiene nada de sencillo ni de “mecánico”.
2. Establecer la correspondencia entre el sonido identificado y la letra que lo representa.
Recién en este momento entran a jugar las letras. Para poder establecer esta correspondencia es necesario, efectivamente, conocer los sonidos de las letras. Pero eso es distinto de desarrollar la conciencia fonológica.
En próximos posteos profundizaremos este tema, respondiendo a preguntas tales como:
¿Por qué nos cuesta tanto a los adultos comprender qué es la conciencia fonológica?
¿Cómo promovemos el desarrollo de la conciencia fonológica en nuestros niños y niñas?
¿Hay niveles de conciencia fonológica? ¿Cuáles son?
¿Cómo se relaciona el desarrollo de la conciencia fonológica con el aprendizaje de la escritura? ¿Y con el de la lectura?